La belleza es una palabra muy subjetiva. Lo que es bello en un país no lo es en otro, ni tan siquiera lo que significa la belleza para mi tiene por qué ser lo mismo para mi vecina.
Pero desde luego la belleza no es solo ir a la peluquería o a un centro de estética a ‘ponernos guapas’. Para mi la belleza es un conjunto en que debemos trabajar todos los días y, por supuesto, hay que trabajarla por dentro y por fuera.
¿Nunca te has preguntado por qué tienes la piel tan seca o con acné? ¿Si te has gastado mucho dinero en cremas y tratamientos buenísimos o por qué no pierdes peso si te estas haciendo tratamientos de presoterapia, cavitación, maderoterapia o el último tratamiento revolucionario que se hacen las famosas pero a ti no te funciona?
En todo esto influye nuestro estado de ánimo, nuestra alimentación y el ejercicio que realicemos.
El estado de ánimo como factor influyente en la belleza:
Cuando estamos de buen humor o felices nuestro cuerpo produce mayor cantidad de hormonas como la serotonina, la dopamina y las endorfinas, sustancias que nos ayudan a retrasar el envejecimiento. Sabemos que es muy difícil controlar el estrés, la ansiedad o superar una situación de tristeza pero todos tenemos problemas y cuando resolvemos uno surge otro. Intenta hacer un esfuerzo por cambiar tu filosofía de vida y darle importancia a lo que realmente lo tiene….. y si aún así sientes que no puedes, pide ayuda que seguro tienes personas a tu alrededor con ganas de ayudarte.
Lo mismo pasa cuando hacemos algún deporte, llámese también ejercicio, bajar o subir las escaleras de tu edificio. Esto no solo nos beneficia con nuestros tratamientos corporales – ya que nos ayudan a quemar grasas y expulsarlas de nuestro cuerpo a través de los poros mediante el sudor – sino que también activa nuestro metabolismo y estimula el sistema sanguíneo que recorre todo nuestro cuerpo llevando nutrientes y oxigeno. Por tanto depuramos y desintoxicamos todos nuestros órganos. En otras palabras, hacemos un peeling interno que contribuye a tener una piel más radiante y a estar receptiva a cualquier ayuda externa (como algunas cremas) ya que se absorben mejor y llegan a donde tienen que llegar.
Para resumir me gustaría puntualizar que, aunque ya que no es un secreto para nadie que si nos alimentamos con una dieta variada aportamos a nuestro cuerpo distintos nutrientes y vitaminas, además es importante hacernos un diagnostico sobre nuestros “problemas” para poder reforzarlos mediante comidas que aporten aquello que necesitamos. Ya os escribiré otro post haciendo algunas recomendaciones.
Todo esto es el cóctel de belleza: come bien, haz deporte, sé feliz y ven a nuestro centro solo a retocarte, mimarte y guiarte en tu búsqueda de la belleza natural.
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